La atmósfera desborda personalidad y la absurdez de todo y los diálogos le da un toque bastante estrambótico a la experiencia.
Le encontré fallos en el colisionador de algunos objetos que parecen ocupar una extension menor al sprite en sí, haciéndome hacerles click varias veces a algunos de ellos para poder interactuar, y el hecho de que en muchas conversaciones a veces había demasiado retraso entre frases, dando la impresión de que la coversación había terminado, pero no podía moverme y derepente aparecía una frase más.
Por el resto una inmersión muy conseguida, aunque no conseguí ver realmente el tema de la jam en la narrativa hasta el final del todo.