Madre mía, ¡qué gusto de juego! Al principio, debo de reconocer que estaba un poquillo perdidilla y que iba dando bandazos, a punto incluso de rendirme, pero luego cuando di con la clave...
Es una aventura muy chula, colorida y con unos personajes extremadamente carismáticos.
No tengo nada negativo que decir sobre esta obra, exquisita. ¡Enhorabuena!